En las últimas décadas la biología molecular ha cambiado la manera de pensar la medicina y seguramente seguirá  haciéndolo en el futuro. Hoy es posible  trabajar con el material genético de manera impensada tan solo años atrás: podemos purificar el ADN en nuestro laboratorio, amplificarlo por millones, cortarlo en sitios específicos mediante enzimas de restricción, recombinarlo para generar nuevas proteínas y secuenciarlo para dilucidar su estructura molecular.  En síntesis,  una verdadera batería de herramientas que aportan de manera constante  nuevas respuestas diagnósticas y terapéuticas que nacen directamente de  las exploraciones del genoma humano.

Nos esperan tiempos de grandes avances, en particular en el área de  la Farmacogenómica y  la Neurobiología.

FIBIO pretende acompañar estos desarrollos con la misma creatividad,  dinamismo y capacidad de cambio que supo aplicar desde su creación, hace ya más de 20 años participando activamente de  los desafíos que proponen los avances científicos/tecnológicos del siglo XXI .